1/1/2020 - 31/12/2022
La violencia como fenómeno humano ha sido estudiado profundamente luego de la pos guerra por diferentes disciplinas con importantes desarrollos. En la actualidad su abordaje se centra en la distinción de las violencias interpersonales. El uso del plural ha permitido profundizar su estudio distinguiendo sus causas y dispositivos con las derivaciones prácticas correspondientes. El pasaje de la violencia como macro fenómeno a las microviolencias dio lugar al reconocimiento de sus consecuencias en el plano de la salud integral. La Asamblea Mundial de la Salud, en su reunión de 1996 en Ginebra, declaró a la violencia como uno de los principales problemas de salud pública en todo el mundo. Estudios epidemiológicos que analizan la circulación y dinámica de las violencias coinciden en establecer que el sector de la población que se encuentra en mayor riesgo de ser victimizada lo constituyen las mujeres menores de edad. El tema de la violencia patriarcal contra las mujeres y los niños constituye un problema social estructural que trae consecuencias dañosas sobre la vida, llegando incluso hasta ocasionar la muerte. Por violencia de género entendemos las violencias que padecen las mujeres de distintas edades, que tienen sus raíces en la discriminación histórica y la ausencia de derechos que las mujeres sufren en muchas partes del mundo, mediante las cuales se intenta perpetuar el sistema de jerarquías impuesto por la cultura patriarcal y que se sustenta sobre un constructo cultural que se ha denominado "género". Está suficientemente demostrado que no se trata de una violencia aleatoria, por el contrario responde a causas precisas y una de sus características es que ser mujer es factor de riesgo. La forma más usual de violencia que sufren las mujeres se da en el marco de la intimidad de su pareja. Por ello consideramos de alta relevancia estudiar y afrontar esta problemática en los inicios de las relaciones de pareja, es decir durante los noviazgos adolescentes, importancia que se pone de manifiesto al relevarse un alto número de noviazgos violentos, momento vital donde pueden consolidarse modalidades de relacionamiento basadas en la asimetría de poder a favor de los varones y en perjuicio de las mujeres. Poder conocer esta problemática en dicho momento es muy importante a efectos de proveer insumos para su prevención mediante metodologías de abordaje, así como a través de políticas públicas debidamente orientadas.