1/1/2025 - 31/12/2026
El cáncer es una enfermedad que no tiene edad. Aunque, cada vez el índice de curación es mayor gracias a los avances tanto en el área preventiva como en los tratamientos antineoplásicos ya sea quirúrgico, radioterapia o quimioterapia, estas dos últimas técnicas terapéuticas provocan numerosos efectos adversos en todo el organismo, inclusive la cavidad oral. Las más graves son la mucositis, afección se manifiesta con úlceras muy dolorosas que pueden imposibilitar al paciente a alimentarse correctamente y la xerostomía por falta de secreción salival que ocasiona dificultad para el habla, dolor o molestias orales, dificultad para la masticación, la deglución y la percepción de los sabores. Además la ausencia de saliva favorece la aparición de infecciones, especialmente fúngicas, por la formación de fisuras y ulceraciones en la mucosa, la aparición de caries dental y afecta el sueño porque la sequedad despierta al paciente en repetidas ocasiones durante la noche. Por ello, es importante ayudar al paciente oncológico a encontrar aliados para reemplazar a la saliva y que puedan cumplir la función de protección y lubricación de la mucosa oral que la misma cumple. Existen en casas dentales y algunas farmacias productos identificados como saliva artificial. Contienen los mismos componentes de la saliva natural, pero son difíciles de conseguir, tienen precio elevado y no poseen cobertura de obras sociales y prepagas por lo que el paciente debe abonar el 100% de su costo. Existen otras opciones como infusiones de manzanilla, malva, caléndula o jengibre, aceite de oliva o de cúrcuma, entre otros. Por ello, creemos necesario evaluar la eficacia de diferentes reemplazantes de la saliva en pacientes oncológicos con xerostomía, a través de un cuestionario, para analizar la efectividad de cada uno.