1/1/2017 - 31/12/2018
En los últimos a?os, las grasas y aceites han adquirido una importancia considerable en la alimentación animal, aportando los ácidos grasos esenciales (AGE) omega-3 (n-3), y omega-6 (n-6). Las distintas proporciones de n-3 y n-6 en las membranas celulares y en los tejidos del tracto reproductivo en las especies no rumiantes reflejan las cantidades consumidas en la dieta. Se ha demostrado en otras especies domésticas que el consumo de altos niveles de n-3 produce un incremento de los mismos en las membranas espermáticas, con mayor habilidad para fertilizar, mejorando las funciones fisiológicas y reproductivas. Por otro lado, la vitamina E es un antioxidante natural capaz de inhibir la formación de radicales libres. Se hipotetiza que, en caninos, la suplementación con n-3 proveniente de aceite de pescado, mejorará las características del eyaculado, status antioxidante y disminuirá el da?o oxidativo, siendo las diferencias mayores en los animales suplementados con vitamina E.